Anelya y the Cheekbones

Conocía a Anelya hace poco menos de un año en Reykjavik en la "white house" de WWF donde nos albergábamos antes de ir a trabajar a Lunga Art Festival en Seydisfjourdur. Lo primero que me encantó fue su pijama de balones de futbol-planetas de satén.

Anelya es un ser libre y autónomo que aporta originalidad y entusiasmo a todo lo que hace, ya sea cantar, bailar, jugar o cocinar. Se presentó como amante de los Luna Cats, que yo creo que se inventó ella misma y de los cuales nos hizo un dibujo representativo y nos sorprendía decorando la mesa de la cocina con flores o cortando los tomates en forma de estrella.
Aquí está ella en una librería escondida que había en el colegio donde dormíamosEsta fotografía es de un día que fuimos a hacer senderismo y Riina, Irene, Anelya y yo nos separamos del resto, al final tuvimos que bajar temerariamentelas por donde las cascadas que salen en la fotografía, no comprendo como seguimos vivas. Anelya disfrutaba apasionadamente del taller que impartió Henrik Vibskov en el que se tenía que realizar toda una escenografía exclusivamente con cuerdas encontradas. Vibskov es un afamado diseñador de moda danés y además toca la batería en TRENTEMØLLER, todo un lujazo poder asistir a un taller suyo.
La semana pasada Anelya me pasó el video de la canción "My Bus" que han hecho con su grupo The Cheekbones. La canción ya la conocía y me encantaba, pero el video también me chifla.

Os dejo esta última secuencia de Anelya jugando con un niño "revoltosillo" islandés.

fotografías: Blanca Galindo